Actualizado hace: 938 días 1 hora 33 minutos
Manta
Carlos Quinto, un actor de cepa

Esta es la historia de un chico que siempre quiso ser actor y lo logró.

Lunes 11 Agosto 2014 | 12:33

Su oportunidad llegó como el teatro. El protagonista de una obra que preparaban en su colegio “se rompió una pierna” (se enfermó) y él tomó su lugar. Fue su primera experiencia en el arte. Con su participación en esta puesta en escena del colegio Abdón Calderón, de Portoviejo, el chico confirmó que el teatro era lo único que iba hacer “cuando sea grande” y de lo que iba a vivir.

Así fue. El chico salió de el sitio El Tigre de la parroquia Chirijo de Portoviejo y llegó a Manta para emprender su camino en el teatro. 
Trayectoria. Ahora, 27 años después de aquella primera experiencia, el chico que nació entre las montañas de El Tigre tiene su nombre posesionado en el teatro y cine manabita y ecuatoriano. 
Carlos Quinto, de 47 años, considera que el verdadero actor se forma en las tablas del teatro. Ha participado en un sinnúmero de obras de teatro de las cuales recuerda “Los Atajos de Amado” y “Sobreviviendo”, como las experiencias más significativas por el trabajo y producción. 
También ha participado como actor, productor y director de 14 películas entre las que destaca: “Eillinn”, una producción holandesa; “Crónica” (2003), de Sebastián Cordero y “Un hombre y un río”, de Franklin Briones. 
Durante su carrera, Quinto no sólo ha crecido como actor sino también como un formador de nuevos talentos. 
“Es emocionante saber que estoy cosechando los frutos de las semillas que hemos sembrado con mi esposa”, dijo el manabita.
Para él, el actor manabita se caracteriza por su fortaleza y por ser a todo terreno, pues no sólo actúa, también produce, dirige y es promotor cultural.
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