El estudio realizó un total de 1.800 encuestas en Ecuador, México, Colombia, Perú, Chile y Argentina.
De acuerdo a él, cuando los ecuatorianos siguen a sus equipos experimentan varios sentimientos: 23% ansiedad, el 49% alegría, el 23% esperanza, el 4% desespero, 1% tristeza, los cuales son propios de los "días difíciles" de las mujeres.
Además, el 36% de los hombres esperan que su pareja le dé apoyo cuando ve un partido, mientras que el 9 % prefiere que lo dejen ver el evento en silencio, el 15% quiere que lo consientan y lo hagan sentir más cómodo, el 5% que lo dejen solo, y el 35% desea que comprenda el juego y lo comenten juntos.
Por su parte, los ecuatorianos experimentan varios sentimientos cuando su equipo ha perdido un partido. El 57% experimenta una sensación de tristeza, el 13% se mantendrá por un tiempo con mal humor, al 5% le da hambre, el 21% no puede controlar la frustración y el 3% se siente desesperado.
Cuando el equipo ecuatoriano ha perdido varios pensamientos pasan por la mente de sus fanáticos. El 51% piensa que el próximo partido ganarán, el 7% piensa que sus amigos hinchas de otros equipos los molestarán, El 1% piensa que no volverá a ver a su equipo por el resto de la temporada, el 4% identifica un jugador para culparlo de la derrota y el 36% se relaja y piensa en el próximo partido.