Tres vocalistas inglesas han revelado que la mítica canción iba dirigida inicialmente a ellas y que Kylie “insistió” en apropiarse de ésta para relanzar su entonces maltrecha trayectoria profesional, un acertado movimiento que dio sus frutos pocos meses después.
“¿Sabes qué canción iba a ser para nosotras, pero que al final nos acabaron robando? ‘Can’t Get You Out of My Head’, de Kylie Minogue. Estábamos convencidas de que iba a ser un éxito seguro tan pronto como empezamos a ensayarla. Pero al final la discográfica de Kylie insistió en que debería quedarse con ella y por eso hicieron todo lo que estaba en su mano para hacerse con los derechos”, aseguró la cantante Liz McClarnon al portal de noticias Digital Spy.