Habiendo muchos sectores ciudadanos que cuestionan la realización de estos espacios, coincido con quienes los consideran un acierto del régimen informar a la ciudadanía desde distintos y hasta remotos lugares del territorio nacional, las actividades gubernamentales encabezadas por el primer mandatario quien, tildado como un “showman”, realmente es un vehemente comunicador, especialmente cada sábado, en que las tres horas programadas le quedan cortas para transmitir al auditorio presente, televidentes y radioescuchas hasta del extranjero todo lo que tiene en carpeta, por lo que coligo es -entre otros causales- por ese soporte y contacto semanal que la popularidad del régimen alcanza las altas cifras de respaldo que son públicas y en las que se basa el accionar del gobierno con sus aciertos y errores, según el punto de vista de quien lo juzgue. Como se lo quiera tomar, estas sabatinas del gobierno son luego del fútbol y algún espectáculo artístico que se realice, el mayor evento del fin de semana, que, como están vigentes las 40 horas semanales que enterraron el tan beneficioso sábado inglés, facilita a la población prender la TV para ver el Enlace Ciudadano que es como oficialmente se denomina. 

He advertido que son diferentes los propósitos de los asiduos a todos los sábados presenciar el despliegue técnico, seguridad, logística, y obviamente el verbal, éste, a cargo del protagonista del verdadero espectáculo (otra vez en el mejor de los sentidos) que es el accionar del primer mandatario de este país; y lo hacemos, unos para afianzar sus críticas, otros con el fin de reforzar su lealtad al régimen, y la minoría -a la que se debe este servidor- entre otras buenas razones, con el fin de poder escribir notas como esta, lo más pegadas a la necesaria imparcialidad que es la que equilibra la polarización de las ideas.