Así lo afirma Max Chóez, uno de sus asiduos clientes, quien añadió que con sus familiares y amistades pasa gratos momentos en dicho local, sobre todo en los días cuando hace mucho calor, “pues caen como anillo al dedo estos deliciosos refrescos”, manifestó.
A Baque su clientela lo conoce como “El Rocho”.
Comenta que trabaja de 09h00 a 14h00, vende 150 refrescos, el costo es de 25 centavos, pero en los días calurosos la gente consume más. La actividad la realiza desde hace 12 años, y la complementa con el expendio de empanadas de plátano y de harina y corviches, “todo es caída y limpia”, expresó.
A la" esquina del Rocho" llegan personas de toda edad y condición social quienes se refrescan y conversan un momento, "y si se ven a los años repiten la dosis de refrescos y empanadas para estar unos minutos más”, aseveró Baque.