La selección "azurra" abrió el marcador durante el primer tiempo, con un gole de Mario Balotelli, dejando un paso atrás a una desesperada selección alemana. 

Una segunda oportunidad fue aprovechada por Balotelli, quien convirtió el segundo gol y se coronó como el héroe italiano.

Al minuto 91, Ozil logró su única oportunidad a través de un penalti, logrando rescatar el honor de su selección. Pese a la incursión de Ozil los minutos se acabaron, y el triunfo único fue para los italianos, quienes deberán enfrentarse este domingo con el campeón del mundo, España.