La estrella española Penélope Cruz insiste en que no le preocupa hacerse mayor ni tener los signos del envejecimiento.
Para la intérprete madrileña, las arrugas son bellas y son símbolo de la experiencia, y no dudaría en “abofetear” a aquellas mujeres que se obsesionan con detener el paso del tiempo. “Cuando oigo a ciertas mujeres que están en torno a los 30 y ya andan preocupadas por hacerse mayores, me dan ganas de abofetearlas. Cuando tenga 80 años quiero mirarme al espejo y parecer que tengo 80. Mi abuela tenía un montón de arrugas y cada una contaba una historia, explica.