Esto, porque pese a que se abrieron las puertas como de costumbre no se observó a gran cantidad de personas realizando algún trámite.
Por ejemplo, en el pago del impuesto prediales del municipio la atención fue olgada, pues las filas que se dieron durante la semana no se reflejaron ayer.
Lo mismo ocurrió en otros departamentos de esta institución.
Otra entidad que lució prácticamente vacía fue el Banco Nacional de Fomento, que por lo general esta abarrotado de personas.
En la Gobernación de Manabí fue la misma historia. Sólo se observó a los empleados trabajando en sus puestos con normalidad.
"Es raro trabajar un sábado, pero hay que ser responsables con nuestro trabajo", dijo Alfredo hernández, quien es empleado municipal.
El ciudadano José Peñafiel, quien acudió a pagar sus impuestos, indicó que al parecer si se cumplió con el trabajo normal, ya que en las afueras de las entidades no había parqueaderos y los sábados por lo general eso no ocurre.<