Debe ser el deber de cada uno de los que habitamos en esta ciudad, el cual depende nuestro propio accionar y no del Gobierno Municipal. Una de esta tareas en embellecer las edificaciones que tenemos cuyas apariencias denotan imagen pueblerina que en nada favorecen el desarrollo urbanístico de Portoviejo del siglo XXI.
Las casas, construcciones como se las quiera llamar tienen cuatro fachadas: La frontal, las laterales derecha e izquierda y la posterior. Sin embargo solo le hemos dado importancia a la frontal o principal olvidándonos de las otras fachadas, que como ejemplo podemos citar los edificios el Ariete, El Barón, ubicados en la calle Córdova o como observamos a lo largo de la calle sucre, ingresando a la ciudad desde el Puente Rojo o por último observen uno que acaban de construir frente al Estadio Reales Tamarindo en la Avenida Universitaria.
Tuve el honor de conocer al arquitecto Sixto Durán Ballén cuando desempeñábamos las funciones de Diputados Nacional y él me explicaba su teoría de la quinta fachada, refiriéndose a la cubierta de las edificaciones, a la cual él recomendaba darle un tratamiento adecuado en su textura y especialmente en el color, con el fin de mejorar la concepción arquitectónica de las edificaciones y por consiguiente lograr con ello, ciudades más agradables, acogedoras y bellas en su conjunto.
Estás teorías debemos tenerla presente en nuestra ciudad en razón de que las edificaciones son totalmente descuidadas en sus fachadas laterales y posterior, especialmente la que por estar contiguas a otros predios solo pueden ser paredes colindantes, las que aparecen sin tratamiento de enlucidos y color, lo que refleja un estado de abandono que no solo incide en un constante deterioro de dicho elemento constructivo sino que también genera una desagradable imagen visual que atenta contra el ornato de la ciudad.
Queremos un Portoviejo bonito, acogedor y agradable, pues bien el Municipio de Portoviejo, entidad rectora del Desarrollo Urbano- Integral de la urbe, debe de aprobar una ordenanza que obligue a los propietario de las edificaciones de la ciudad a que den un adecuado tratamiento a las fachadas laterales y posterior, mediante la utilización de materiales y colores, lo cual va a producir tener edificaciones con una sana y atrayente imagen visual y que permitan disfrutar de hermosos espacios urbanos.
Si los propietarios no cumplimos en la ordenanza deberá constar que el Municipio lo hará de su propio peculio, de paso generando fuentes de trabajo y cobrará dichos valores mediante títulos de crédito de manera inmediata.
Ojala algún concejal se interese. <