Los nuevos precios de la materia prima no han provocado efectos negativos en los locales de venta de materiales de construcción.
El alza del  hierro laminado está vigente desde febrero pasado. Este mes le tocó el turno  al cemento.
El quintal de hierro que se mantenía en 45 dólares se oferta ahora en 53 dólares.
El quintal de cemento vale 6,82 dólares. Subió en 1,5 por ciento (10 centavos).
La alza de hierro, según los distribuidores, se origina  por la sobredemanda mundial de acero.
Los mayores productores, Brasil y Venezuela, tienen logran abastecer la demanda.
Ecuador no produce acero, lo importa en lingotes, para luego laminarlo.

 provedores. Sonia Zambrano, representante de Sosvos, una de las seis franquicias de Disensa en Manta, asegura que se vende igual.
Empresas, ingenieros, maestros y la misma ciudadanía mantienen la demanda.
La masiva construcción de urbanizaciones dentro y fuera de los límites de Manta se revierte favorablemente para las distribuidores, indicó.
Destacó que las franquicias ofrecen ventajas como vender el hierro figurado, estribos, columnas y vigas elaboradas, lo que abarata costos.
José Isaac Vélez, distribuidor de Disveca, dice que el boom de la construcción privada es imparable.
Más que el incremento los constructores miran su interés en el negocio inmobiliario y de avanzar en los proyectos destinados a servicios de salud, centros comerciales y residencias.
Todos los años hay ligeros incrementos, agregó.
Las diferencias de precios en las distribuidoras, dijo no pasan los márgenes del 2 y 3 por ciento.
Ramón Cornejo, profesional de la construcción, dijo que los incrementos afectan cuando las compras se hacen a medias, por eso, lo importante es proveerse primero del hierro y el cemento que es lo básico de una obra. Nunca se sabe cuando llega el alza, comentó.
En Manta y sus alrededores se construyen más de 20 urbanizaciones privadas. <