Hay cientos de casos de gente que no fue ratificada en sus funciones y ahora tienen que volver a buscar una nueva plaza de trabajo para llevar el sustento a sus hogares.
Es el caso de una maestra y madre de familia, que pidió la reserva de su nombre, quien laboraba en una escuela fiscal de Portoviejo y su contrató feneció el 31 de diciembre.  Ella dijo sentirse triste porque lleva cinco años en la docencia y aún no puede conseguir algo estable.
Ahora sólo le toca esperar el próximo año lectivo para ver si el Ministerio de Educación o un plantel educativo privado le brinda un contrato por un año más, “mientras tendré que ver cómo me las arreglo para atender a mis hijos”, agregó la maestra.

Inseguros
Por otra parte hay personas a las que se les terminó el contrato y aún no saben si seguirán en sus puestos. Esto sucede, por ejemplo, en la Comisión de Tránsito y Transporte Terrestre, donde laboran 23 personas que atienden en la matriculación, emisión de licencias y otros trámites, que desconocen cuál será su futuro.
Fernando Molina es uno de ellos. Comentó que hasta ahora no le han comunicado si seguirá trabajando en el lugar, pero igual sigue asistiendo con responsabilidad y con el optimismo de ser ratificado.
Lo mismo piensan sus compañeros, quienes además coincidieron en que necesitan del empleo y más ahora que la vida está dura.

Prefectura
En similar situación se encuentran más de 120 personas que se desempeñan como empleados y trabajadores del Consejo Provincial de Manabí. A ellos también se les terminó su contrato el 31 de diciembre y a muchos les han pedido que firmen un finiquito.
Sin embargo, se aferran tanto a sus puestos que habían anunciado hasta un paro que luego fue suspendido, ya que se les llamó a un diálogo para definir su situación en esta semana.

Otro caso
Algo diferente ocurre en la ex Defensa Civil, allí no labora personal por contrato, pero los empleados recibieron una comunicación que les pide sus renuncias voluntarias.
Tras el comunicado dos personas salieron de la entidad el mes pasado, el guardalmacén y un conductor.