América Latina será un territorio de paz sólo cuando exista una verdadera justicia social "porque no se puede tener paz con situaciones de injusticia e inequidad", afirmó, en un discurso de bienvenida a la Marcha por la Paz, que llegó a Quito tras recorrer 90 países en todo el mundo, señala un comunicado de la Presidencia.

Cientos de personas, sobre todo jóvenes, acompañaron a los organizadores de la Marcha por la Paz, que se congregaron en las afueras del Palacio presidencial de Carondelet, en el centro de Quito, donde les recibió Correa.

El jefe del Estado ecuatoriano, un economista que se define de izquierda, arengó a los asistentes a luchar por "la verdadera paz" que se fundamente en la justicia y se comprometió a "construir una cultura, un país de paz" y combatir a la violencia que se reproduce de forma cotidiana.

"Cuando un niño muere por no tener una buena atención en un hospital, que unos cuántos dólares sea la diferencia entre la vida y la muerte, es una bala cotidiana que aún se disparan en este país", admitió Correa, que también habló de la violencia económica.

"Tasas de interés estratosféricas en un país dolarizado (como Ecuador) y utilidades extraordinarias (de empresarios): ¡Eso es violencia!", enfatizó el gobernante, que también destacó la salida en septiembre pasado de un puesto militar estadounidense en la Base de Manta, en el oeste de su país, cedido hace diez años.

Esa retirada del puesto militar de EE.UU. de Manta, ordenada por él, es un paso hacia el sostenimiento de la paz en la región, añadió Correa, que también destacó los aportes que en ese sentido se han discutido en el seno de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

"Hay una propuesta muy concreta del presidente (peruano) Alan García, para disminuir sustancialmente el gasto en armas en Suramérica, para tener un Consejo de Defensa, para evitar las agresiones en nuestros países", recordó Correa.

Insistió en que la paz debe estar atada a la justicia social y apostilló que una de las formas de violencia cotidiana es la convivencia de "la intolerable opulencia al lado de la más indignante miseria".

Felicitó a los extranjeros que acompañan y coordinan la Marcha Mundial por la Paz y se refirió a que para ingresar en Ecuador los foráneos no requieren de visados, ya que su Gobierno alienta el principio de libre movilidad humana.

"Ojalá pronto tengamos un mundo sin ninguna clase de muro, ni el Muro de Berlín, pero tampoco el de Tijuana". añadió Correa.

La Marcha Mundial por la Paz es una acción promovida por la organización Mundo Sin Guerras, que partió el pasado 2 de octubre de Nueva Zelanda y prevé llegar el próximo 2 de enero a Punta de Vacas (Argentina).