Jorgito, de 7 años de edad, sufrió un accidente la tarde de ayer en la ciudadela Los Olivos en Portoviejo.
La tarde transcurría como una más mientras Tania, la madre de Jorgito,
concluía con sus labores del hogar.
Eran las 15h45 cuando el menor le dijo a su progenitora que le diera permiso para salir a jugar un momento con sus amiguitos porque ya había terminado de realizar sus tareas, la madre, con un poco de desconfianza, le permitió salir diciéndole que no se alejara mucho de la casa.
El pequeño niño salió sin imaginarse que más adelante sufriría un terrible incidente, que talvez lo marcaría para toda su vida.
El accidente
Jorgito corría contento cuando sin darse cuenta, al pasar por la casa de la familia Bravo, ubicada en la calle Vicente Zambrano del mismo sector, le saltó un perro que lo atacó sin piedad, dejándolo en el suelo con una gran herida en su pequeña cabeza, la cual no paraba de sangrar.
Fue tal el dolor que el niño comenzó a gritar y llorar, llegando los gritos desgarradores a los oídos de la madre, quien salió en precipitada carrera a auxiliar a su hijo, encontrándolo casi inconsciente en el suelo polvoso y el gran animal aún encima de él.
La señora, al ver semejante escena, recogió un pedazo de madera y golpeó al animal para que soltara al niño. Luego levantó a su pequeño hijo y lo llevó enseguida al hospital Verdi Cevallos Balda, en donde los médicos le brindaron
los primeros auxilios al menor.