El Kremlin anunció en un comunicado oficial que el presidente Vladimir Putin no encabezará la delegación rusa en el diálogo con Ucrania previsto para este jueves, 15 de mayo de 2025, en Estambul.
En su lugar, la delegación estará liderada por el asesor presidencial Vladimir Medinski, quien ya participó en las conversaciones de paz de 2022. Lo acompañarán el viceministro de Defensa, Alexander Fomin, y el viceministro de Exteriores, Mijail Galuzin, según informó la agencia estatal rusa TASS.
Esta decisión llega tras la propuesta de Putin del pasado 11 de mayo de retomar diálogos directos con Ucrania en la ciudad turca, un esfuerzo que busca reanudar las negociaciones frustradas en 2022.
Por su parte, fuentes de la Casa Blanca confirmaron a la cadena CNN que el presidente Donald Trump, quien se encuentra en una gira por Oriente Próximo, tampoco asistirá a las conversaciones.
Trump indicó horas antes en una conferencia de prensa que estaba la “posibilidad” de viajar a Estambul, diciendo que a Putin “le gustaría que estuviera allí”. Sin embargo, en su lugar acudirán el secretario de Estado, Marco Rubio, y los enviados especiales Steve Witkoff y Keith Kellogg.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, ha condicionado su asistencia a la presencia de Putin. En su discurso declaró: “Estoy esperando a ver quién viene de Rusia, y entonces decidiré qué pasos debe dar Ucrania”.
Añadió que las señales provenientes de los medios sobre la delegación rusa eran “poco convincentes”, según informó Al Jazeera. Hasta el momento, no ha habido una voz oficial sobre su asistencia a este encuentro.
Ucrania busca la paz
Las conversaciones propuestas en Estambul representan el primer intento de diálogo directo entre Rusia y Ucrania desde marzo de 2022, cuando las negociaciones en la misma ciudad no lograron avances significativos.
Según el Kremlin, aquel proceso fue frustrado por presiones de la administración del entonces presidente estadounidense Joe Biden sobre Ucrania, una acusación que no ha sido verificada de forma independiente.
Las discusiones de 2022 buscaban un alto el fuego y acuerdos sobre el estatus de neutralidad de Ucrania, pero colapsaron tras la retirada rusa de la región de Kiev y las denuncias de atrocidades en Bucha.
El contexto actual está marcado por una propuesta europea del 10 de mayo de 2025, liderada por los líderes de Francia, Reino Unido, Alemania y Polonia, que exigió a Rusia aceptar un alto el fuego incondicional de 30 días a partir del lunes, 12 de mayo, bajo amenaza de nuevas sanciones.
Putin rechazó esta condición y propuso negociaciones directas sin prerrequisitos, una postura respaldada por Trump, quien instó a Ucrania a aceptar la reunión “inmediatamente” en un mensaje en Truth Social el 11 de mayo.
Posturas de las partes
Zelensky ha pedido un alto el fuego previo para que haya un entorno seguro para el diálogo. En un mensaje publicado en X el 11 de mayo, afirmó: “Esperamos un alto el fuego completo y duradero a partir de mañana para sentar las bases de la diplomacia”.
Sin embargo, la ausencia de Putin en la delegación rusa podría llevar a Zelensky a reconsiderar su asistencia, según un funcionario ucraniano. Por su parte, el Kremlin, a través de su portavoz Dmitry Peskov, se limitó a declarar que la composición de la delegación rusa se anunciaría “cuando el presidente lo considere necesario”.
Turquía, bajo el liderazgo del presidente Recep Tayyip Erdogan, ha reiterado su disposición a mediar en las negociaciones, destacando su papel neutral y su experiencia previa en 2022.
El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, expresó en una conferencia de prensa en Ankara que el país está listo para “facilitar un compromiso” entre las partes. Erdogan habló con Putin el 11 de mayo y expresó su apoyo a la iniciativa rusa, según un comunicado del Kremlin.
Expectativas y desafíos para Ucrania
La ausencia de los líderes principales reduce las expectativas de avances significativos en Estambul. Analistas citados por The Globe and Mail consideran “altamente improbable” que Putin hubiera asistido, dado su historial de enviar delegaciones de menor rango a negociaciones internacionales.
Además, Rusia mantiene demandas maximalistas, como el reconocimiento de los territorios ocupados y la renuncia de Ucrania a ingresar en la OTAN, lo que dificulta un acuerdo.
Por otro lado, la presencia de altos funcionarios estadounidenses como Rubio, Witkoff y Kellogg indica el interés de Washington en mantener un rol activo en el proceso, aunque la decisión de Trump de no asistir podría interpretarse como un paso atrás en su compromiso personal.
Las negociaciones enfrentan el desafío adicional de la falta de un alto el fuego activo, con reportes de bombardeos rusos en la región de Kharkiv el martes, 13 de mayo, que dejaron al menos tres muertos.