El senador Barak Obama desechó ayer la invitación de la senadora Hillary Clinton para un debate sin intermediarios mientras ambos continúan casi empatados en su brega por la candidatura presidencial demócrata.
"Estamos, esencialmente, muy cerca de un empate", admitió el presidente del Comité Nacional del Partido Demócrata, Howard Dean en declaraciones a la televisión. Clinton, quien va a la zaga en el número de delegados ya elegidos para la Convención Nacional, invitó ayer a Obama a un debate sin moderador, al estilo de los que mantuvieron hace 150 años Abraham Lincoln y su oponente demócrata Stephen Douglas para hacerse con un escaño en el Senado.