Derogar esta medida fue uno de los pedidos de la Federación de Estudiantes Universitarios, FEUE, que la semana anterior protestó varios días. Al final fue aceptada la solicitud, junto con la revisión del valor de las matrículas, que piden sean congeladas. El Consejo Universitario aceptó los planteamientos, además de controlar las frecuentes inasistencias de los maestros, que también afectan a los alumnos porque muchos deben viajar y se encuentran con que no tienen clases. Igualmente, la UTM incrementará los buses para atender la demanda de transportación en la ciudad, y abrirá laboratorios de computación. Luego de una reunión que se realizó con la presencia de más de 20 dirigentes de las diversas facultades y autoridades de la UTM, lideradas por el rector Félix Véliz, acordaron que el costo de las matrículas será analizada la primera semana de diciembre cuando se realice la reunión del Consejo Universitario, aunque el rector les garantizó que no subiría más del 10 por ciento. Tito Álvarez, presidente de la FEUE, dijo que no aceptarán el aumento de las matrículas, ya que la situación económica que los estudiantes están pasando es difícil y la mayoría de los universitarios vive fuera del casco urbano y del cantón. Además, señaló que lucharán por conseguir laboratorios de computación pues pagan 3 dólares en la matrícula y no se benefician de este servicio.