La niña, de quien se supo tiene siete años de edad, se electrocutó con un cable de alta tensión que colgaba de un poste de luz, a la entrada del barrio Los Ángeles. Mientras la madre, Carmen Pico, llora por la terrible situación que atraviesa su pequeña, los moradores de este sector acusan al personal de Emelmanabí de haber dejado este cable expuesto durante varios días. Indicaron que por varias ocasiones llamaron al departamento técnico de esta empresa para que lo recogieran, pero no tuvieron ninguna respuesta. El viernes por la tarde un perro murió electrocutado en este mismo lugar. Mantienen las esperanzas Carmen mencionó que ayer en la mañana fue a comprar al mercado de Tarqui con su hija. Al volver a casa caminaban por la calle principal del barrio Los Ángeles. De pronto, al pasar por donde estaba el cable colgado, la niña fue “halada” por la corriente de 220 voltios. La descarga fue tan fuerte que el cuerpo de la menor ardió en llamas. La mujer dijo que no podía hacer nada para salvar a la niña. En ese momento un conductor que pasó por el lugar socorrió a la menor apagando el fuego con el extintor que llevaba en su vehículo. De inmediato, la herida fue llevada al hospital local, donde los doctores indicaron que la situación de la paciente es de suma gravedad y sólo un milagro la podría salvar, pues a más de las quemaduras también tiene varios órganos comprometidos, lo que agrava su cuadro médico. Tan fuertes fueron las lesiones que el abdomen se rompió y parte de las vísceras quedaron expuestas. En horas de la tarde fue llevada a Guayaquil. Fuera del hospital, los vecinos no ocultaron su rabia contra Emelmanabí.