El Juventus salió derrotado de su visita a Nápoles (3-1) y desechó una buena ocasión para mantener la presión sobre el líder, el Inter, que continuará en el primer puesto tras la novena jornada, independientemente del resultado que obtenga en el partido que hoy jugará en el campo del Palermo. En el otro encuentro adelantado ayer, el Torino ganó por 2-0 al Cagliari. El cuadro local no tuvo el triunfo en sus manos hasta el último tramo del choque, cuando Alessandro Rosina abrió el marcador a los setenta minutos. A falta de cuatro para el final, un gol en propia puerta de Michele Ferri sentenció el choque.