A más de la misión del grupo, se trataron las labores y objetivos que buscan con su labor de vigilancia de este proceso reformatorio. Los integrantes del movimiento Alianza Bolivariana-Alfarista no permitirán que el “hombre del maletín” aparezca por los pasillos del bloque donde sesionarán los 130 asambleístas y se propusieron darle la estabilidad política y democrática a los cambios que requiere el país para su desarrollo. “Seremos 13 millones de ecuatorianos que estarán vigilando lo que se desarrolle en Ciudad Alfaro”, señaló Jorge Correa, integrante del movimiento. Juan Carlos Monge, coordinador de Guardianes de la Constituyente, comunicó que los principios de la organización son defender la democracia participativa, respetar la soberanía y defensa del entorno, entre otros. Fernando Balda, integrante de Guardianes de la Constituyente, declaró a Ciudadanía Informada que la tentación impuesta por viejas costumbres haría temblar la conciencia moral de los futuros asambleístas. “Lo que procuramos es precautelar la Constitución y que los 130 asambleístas no se dejen corromper, porque acá no hay que dudar que se destinarán millones de dólares”, expresó Balda. Otra propuesta de Guardianes de la Constituyente es tener extensiones de la agrupación en otras ciudades del país.