El plan Priza, de regeneración del centro de Portoviejo, es una muestra clara de ello.

Alguna esperanza generó la convocatoria del gerente de la CNEL ante el Consejo de Participación Ciudadana, para que explique por qué está tan mal manejado el proyecto. Pero las promesas de la semana pasada de ejecutar garantías y no dar más plazos al contratista quedaron en el aire.

Incluso se podría llegar a pensar que el no cobrar las garantías es debido a que tanto la contratista como el contratante están asociados en un acto de corrupción o de coimas para, en su momento, haberse adjudicado la obra. ¿Entran las autoridades de control y la justicia también en esta posible corrupción?

En pocos días Manabí llegará al quinto aniversario del terremoto y a la fecha, según la justicia, no hay corrupción. Sin embargo, gran parte de la población siente todo lo contrario, ya que hay varias obras inconclusas, hay muchos nuevos ricos, las investigaciones no llegan a nada y para colmo, ni las garantías de fiel cumplimiento de las obras son cobradas.