La refacturación automática de la energía eléctrica les cayó como balde de agua fría a usuarios, que esperaban pagar menos.
Jessenia Freire no había pagado desde marzo y ayer salió la factura por cerca de 300 dólares. Fue a reclamar y a pedir la firma de un convenio y le dijeron que no podía hacerlo y que lo que tenía que hacer era pagar el consumo refacturado. Pagará 23,12 dólares mensuales junto con el consumo que registre desde este mes, es decir, unos 75 dólares en total, y en una situación difícil porque tuvo que cerrar su negocio por la pandemia.
La abonada consideró que reclamar es “por gusto”. María Pérez Ruiz dijo que cuando empezó la pandemia se fue a vivir a Guayaquil tres meses y pasaba en su casa en Portoviejo unos 3 días al mes; como no podía ver la planilla en la página web de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL), pagó en un banco del barrio 86,64 dólares, cantidad con la que no estaba de acuerdo, por lo que ayer fue a presentar un reclamo en la CNEL Andrés de Vera, trámite que no pudo cumplir porque le dijeron que ya estaba refacturado para pagar la deuda en doce meses, junto con el consumo del último mes.
PLANILLAS. Ayer, miles de clientes ya podían revisar su factura en línea, mientras que a otros les salía la factura “en revisión”. El gerente de la CNEL Manabí, Marcos Bravo, informó que hasta el 30 de septiembre estará subida la información con la factura de este mes, más la cuota por el diferimiento automático de la deuda por los seis meses del estado de excepción (desde marzo hasta agosto), para quienes no pagaron el servicio por este tiempo, que será prorrateada a 12 meses. Es decir, que se pagará el consumo del último mes más la doceava parte de la deuda acumulada.
Eso es lo que preocupa a quienes, por razones diversas, no pudieron cancelar puntualmente la energía eléctrica y porque, al haberse hecho la refacturación automática, les han indicado que no tienen opción al reclamo.