El gerente de Petroecuador, Pablo Flores, precisó en un comunicado de la empresa que la reparación tienen un avance del 20 %, así como en un 50 % de un "poliducto" de derivados que va junto a la línea principal.

Agregó que ya se ha definido una "nueva variante" del trayecto de la tubería, de 1,7 kilómetros de longitud, que evitará la zona inestable que sufrió el socavón.

Según Flores, las condiciones del trabajo de reparación "son muy complejas e inestables debido a las constantes lluvias que se presentan en la zona", aunque remarcó que avanzan las dos variantes establecidas para el paso de la tubería.

Asimismo, indicó que continúan las labores de "remediación ambiental" por el vertido que provocó la rotura del SOTE, así como del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), una tubería de propiedad privada que corre paralela.

"Se mantienen las barreras de contención y se ha retirado material contaminado, así como la respectiva limpieza de las áreas afectadas", señaló Petroecuador en su comunicado en el que recalcó que trabaja con las autoridades locales de las poblaciones afectadas.

"Se ha priorizado la provisión de agua segura a las comunidades afectadas", que se asientan en las riberas de los ríos Coca y Napo, sobre todo la ciudad de Francisco de Orellana.

Petroecuador recalcó que, apenas concluya la reparación, se retomará el bombeo de crudo por el SOTE, lo que permitirá reanudar las exportaciones de crudo, suspendidas por el evento de "Fuerza mayor".

Adelantó que para mayo se han programado el transporte de diez cargamentos de crudo que habían quedado pendientes en abril por la rotura de la tubería.

Por otra parte, el gerente de Petroecuador indicó que sobre el daño sufrido en una estación de la Refinería de Esmeraldas, la más grande del país, se aplicará una "solución momentánea" para recuperar la operación de la llamada "Unidad FCC", considerada el corazón de la planta.

Esa reparación parcial permitirá que la unidad funcione al 65 % de su capacidad, mientras se repara el equipo original en un par de semanas.

Ecuador dispone de tres refinerías, la más grande la de Esmeraldas con capacidad para procesar unos 110.000 barriles diarios de crudo y ubicada en la provincia del mismo nombre (noroeste).

Además, la planta La Libertad, ubicada en la provincia costera de Santa Elena (suroeste) tiene capacidad para procesar 20.000 barriles diarios de crudo, y la de Shushufindi, en la provincia amazónica de Sucumbíos (noreste), de 45.000 barriles diarios. EFE