En el mercado provisional de Bahía Río y en la Plaza Calderón de la misma parroquia, es donde se empezó a aplicar esta nueva alternativa que se implementará en otros mercados de Portoviejo. 

Blanca Guamán, propietaria de un local de abarrotes en el mercado de Bahía Río, ayer empezó a receptar los pedidos por teléfono, y dijo que en el primer día cubrió sus expectativas porque las personas le quedaron agradecidas. 

Esta iniciativa consiste en que el cliente desde su casa puede llamar a cualquier proveedor, quien se encarga de enviarle los productos que solicite hasta la puerta de su casa. 

Ayer, la comerciante tuvo más de 15 pedidos y lamentó no haber podido entregar todas las solicitudes por falta de tiempo, pues sólo atienden hasta el mediodía. 

Guamán indicó que contratan a personas de confianza que se dediquen a hacer los envíos. 

El traslado ayer no tuvo ningún costo, pero hoy podrían cobrar un valor mínimo, indicó.

“La ayuda es mutuamente, tanto para nosotros como para quien nos compra”, comentó. 

Bella Carranza expende queso, longaniza, salprieta y maní en el mismo mercado. Mencionó que ayer tuvo una venta aceptable de sus productos, aunque no la misma cantidad que suele tener en un día normal.

En su caso, lo primero que pide al cliente es que le den bien la dirección y el peso del producto que solicita. 

El envío lo realiza a través de un taxi, pero el cliente debe cancelar la carrera.

 Así, las personas pueden solicitar frutas, legumbres, pescado, carnes, y cualquier producto. 

Lea más información en la edición impresa...