El ruido excesivo que provocan algunos locales de diversión, sus horarios extendidos, la venta de bebidas alcohólicas fuera de los establecimientos, los libadores en la vía pública con parlantes a todo volumen, el doble parqueo, el exceso de velocidad, girar en U en lugares no permitidos, el uso de los espacios públicos como urinarios, y el abandono de basura en solares, veredas y calles, son las infracciones más comunes que detectan los vecinos de una zona que hasta antes de la actual administración de Agustín Casanova fue residencial.

>CONTROLES. Iván Ampuero, director municipal de Control Territorial, dijo que en la avenida y otros sectores se reforzarán los operativos.

“Más que nada en la prolongación de la avenida Manabí se detecta el abuso de ruido, libadores, es decir, un desorden total en el espacio público”, señaló.

También se presentan casos de locales que solicitan permiso para restaurantes y terminan prestando servicio de bar. 

“Si es un restaurante no pueden tener música, pues eso conlleva a otra clase de servicio”, mencionó. 

El pasado fin de semana se notificó a ocho locales que prestaban servicios no compatibles a la aprobación del uso de suelo. Si los casos son reincidentes se procede a retirar los permisos -suspensión- y luego clausura”, precisó. Añadió que a esos locales se les da tres días para que tomen correctivos. 

El funcionario dejó claro que, de acuerdo a la ordenanza de uso de suelo, en la avenida puede existir una actividad comercial mixta, siempre y cuando se respeten las normativas establecidas. 

El intendente de Policía, Kléver Guerrero, manifestó que la entidad aporta con el control de los establecimientos apostados a lo largo de la vía, enfocándose, con mayor fuerza, en controlar la venta de bebidas alcohólicas fuera de bares o tiendas. 

“Según el acuerdo ministerial 069, que regula las acciones de los intendentes y comisarios, en el caso puntual mencionado, se constituye como una falta grave y se procede a sancionar con un salario básico (394 dólares) y la suspensión de actividades por 15 días”, explicó.

Guerrero dijo que, según información que manejan conjuntamente con el ECU- 911, el 34 % de las llamadas que reciben es de personas que denuncian la presencia de libadores en diferentes puntos de Portoviejo los fines de semana. 

Gustavo Barrera, gerente de Portovial, indicó que en promedio se emiten de 20 a 29 sanciones los fines de semana en ese sector.

>QUEJAS. El ciudadano Luis Mendoza considera que “es necesario que en la ciudad haya una zona específica de diversión nocturna”. 

Pero no sólo la bulla genera incomodidad, también que los vehículos se estacionen fuera de los portales o garajes, obstaculizando la salida de las personas si tienen una emergencia.

Incluso hay quienes van más allá. “Esta es la ruta al hospital del IESS, permitir que estos locales y gente estén en esta zona es irresponsable”, dijo un vecino. “Las ambulancias se quedan atrapadas y no pueden pasar; ocurre todos los fines de semana y nadie hace nada”, precisó.