La madrugada del 5 de mayo de 1895 fue especial en Chone y para el Ecuador, ese día una junta especial redactó un manifiesto, donde el pueblo de Chone desconoce al gobierno conservador de Luis Cordero y proclama a Eloy Alfaro como Jefe Supremo de la República.

La batalla de Los Amarillos iba a comenzar tras conocerse la Venta de la Bandera, por esa razón, el obispo Pedro Schumacher liderando a las fuerzas oficialistas de Cordero avanzaron a Chone a capturar a los que consideraba un peligro para el gobierno y sus intereses. 

En Chone paralelamente los esperaban muchos jóvenes unidos a los extranjeros Juan y Plutarco Coppiano Bonino, hermanos militantes del garibaldismo liberal que habían llegado a Chone con un parque militar, y el mejicano Mauro Ramos Iduarte (muerto durante la carga de caballería de la primera oleada), el apoyo de ellos, al igual que el de otros personajes, fue indispensable para la empresa, y armados con machetes salieron al frente de los invasores y el 1 de mayo de 1895 se encontraron en el sitio Los Amarillos (hoy perteneciente a Tosagua). Allí se libra una lucha desigual en la cual los militares oficialistas con entrenamiento y armas de fuego sacaban ventaja, pero cuando parecía que ellos vencían apareció la compañía liderada por Manuel María Barberán, que a machete limpio y al grito de “Viva Alfaro Carajo, afuera la tiranía”, hicieron retroceder a los enemigos. El resultado fue desolador, cientos de muertos de ambos lados. Los sobrevivientes entraron a Chone, en donde todo el pueblo se volcó a felicitarlos y llorar por la muerte de los caídos. El 2 de mayo los sobrevivientes se tomaron el cuartel de Chone sin mayor resistencia.

El 3 de mayo una multitud impresionante los sepultó, pero el fuego insurgente estaba lejos de terminar, al contrario, se avivaba más, y planeaban venganza.

Al siguiente día, 4 de mayo, se realizó una asamblea para luchar por la causa liberal, hasta que llegó la noticia de que el gobierno de Luis Cordero había participado en el negocio de la bandera. Los ánimos se caldearon más, una junta redactó un manifiesto que fue terminado en la madrugada del 5 de mayo, donde “El pueblo de Chone desconoce al gobierno conservador de Luis Cordero y Proclama a Eloy Alfaro como Jefe Supremo de la República”.

La acción de Chone fue determinante, ya que dicha proclama animó a Guayas y el Litoral para convencerse que sí era posible derrotar al gobierno de Cordero.