En esta reveló las “condiciones deplorables” en las que vivía el huésped Julian Assange. Sin embargo, entre sus declaraciones, se refirió al gato del periodista australiano.
El felino había sido separado de su amo con anterioridad, debido a que el activista “no se molestaba en cuidarlo”. El minino “podía ir a todas las habitaciones; sospechábamos que podía llevar un dispositivo... para espiarnos”, aseguró el funcionario.
Reacciones. De acuerdo a lo deslizado por Marchán, se podría haber escondido una cámara en el collar de la mascota. Así, el llamado “gato de la embajada”, que tiene una cuenta de Twitter, se convirtió en motivo de preocupación higiénica y de seguridad para los trabajadores representación diplomática de Ecuador en Londres.
El editor en jefe del portal de revelaciones, Kristinn Hrafnsson, calificó de “surrealmente idiotas” las declaraciones del funcionario ecuatoriano sobre la estadía del activista en la Embajada en Londres.
“(El presidente de Ecuador, Lenín) Moreno afirma que Assange ‘hackeó’ su teléfono, y el embajador le dice a Daily Mail que podría haber entrenado al gato de la Embajada para espiar. Esto es surrealmente idiota”, aseveró Hrafnsson.
La publicación del editor en jefe provocó, por parte de algunos internautas, una ola de burlas hacia tales afirmaciones.