Hugo Pinargote, en cambio, ha trabajado gran parte de su vida vendiendo golosinas en el centro, donde la mayoría de sus clientes eran funcionarios públicos, pero ahora comenta que se fueron porque aún no se construyen los edificios públicos que fueron afectados por el terremoto.

“Aquí estaba el edificio de la Contraloría que generaba movimiento”, expresa al mostrar el terreno vacío que ha quedado en la calle Olmedo entre Sucre y Bolívar.

A dos cuadras de esta calle está el Palacio de Justicia, donde solo se han ejecutado trabajos en su primera fase, mientras que las adecuaciones internas siguen pendientes. Cerca de allí está el edificio del distrito de Educación, que sigue abandonado.

Manuel Giler solía estacionar su triciclo en las calles 10 de Agosto y Olmedo, frente a donde funcionaba  el Banco Ecuatoriano de la Vivienda, que también permanece cerrado y con el patio lleno de maleza. Allí, Giler vendía agua de coco y llegó a recaudar hasta 150 dólares diarios. Ahora, trabaja en las calles Pedro Gual y Olmedo, y afirma que lo máximo que ha recolectado es 40 dólares, “porque el centro sigue estando muerto”.

Giler concuerda en que la falta de instituciones públicas en el centro es lo que ha afectado sus ingresos, pues antes del 2016 todos llegaban a realizar algún tipo de trámite. 

Más edificios.  Los edificios del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Cuerpo de Bomberos, Servicio de Rentas Internas (SRI), Palacio Municipal y Ministerio de Agricultura también están pendientes a tres años del terremoto. Los terrenos permanecen cerrados y, en otros casos, los edificios lucen destruidos.

Procesos. Al consultarle al alcalde Agustín Casanova si ha mantenido reuniones con el representantes de las entidades para que regresen al centro, dijo que no han hablado de eso. “Hay que plantearlo, aunque en realidad la economía de Portoviejo hay que impulsarla por otro lado”, indicó.

Sobre el Palacio Municipal, Casanova recalcó que ya está adjudicado y aspiran a que a finales de este mes empiecen los trabajos. Aclaró que el tema está a cargo de Ecuador Estratégico con recursos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), con una asignación de más de $ 5 millones. “Eso es plata del Estado, nosotros simplemente hicimos las gestiones; presentamos los estudios”, señaló.

La obra tendrá un plazo de 240 días; comprende la primera etapa y consiste en la construcción de 6.682 metros cuadrados del edificio para las áreas de oficinas, parqueaderos, salón de la ciudad y ascensores. 

El alcalde anunció que luego presentarán el proyecto de la segunda etapa al Comité de Reconstrucción,  que bordea $ 4,3 millones.

En los terrenos del excentro comercial irá la plaza mayor, cuyos estudios están listos y el 15 de mayo serán entregados al mismo comité. 

Uno de los proyectos ya aprobados es el primer centro comercial  para los autónomos, que supera los $ 13 millones, mencionó.

Respecto al edificio de los bomberos, Arturo Chávez, jefe de la institución, dijo que están trabajando en los términos de referencia para subir al portal de Compras Públicas y contratar el  edificio, a un costo de $ 1,8 millones.