Luis García vende dulces al menudeo caminando, la semana pasada estuvo trabajando por este sector y dijo que el daño afecta mucho porque no se puede caminar con tranquilidad y mucho menos atender bien a los clientes. 

 

Carros pesados. Los últimos días el paso de carros pesados por la zona, aumentó debido al problema que registra el baipás Quevedo-Quito (zona de la gasolinera de la Unitaxis) y los conductores optan por usar este tramo. 

Carlos Cedeño trabaja en la zona hace tres años y asegura que la vía es muy angosta para el alto número de carros que transitan a diario por esta intersección, por lo que se ven obligados a ocupar los costados de la carretera. 

“Es inevitable que no se dañe la vía porque los vehículos son muy pesados y como no es asfalto se hace baches por todos lados”, dice el trabajador. 

Magaly Domínguez labora en una farmacia y un hotel que funcionan en la intersección, ella señala que se acostumbró al ruido. 

El trajín son las 24 horas, pero durante el día es más, la zona es transitada porque también pasan todos los buses que ingresan a la estación de buses, acota.  

Pablo Briones tiene un comedor en el sector, él afirma que hay días que los clientes prefieren irse a comer a otro lugar porque no tienen donde estacionarse debido a los huecos y charcos de agua que hay frente a su negocio. 

Comerciantes, peatones y moradores piden atención a la autoridad competente.