Ya en el interior de la entidad financiera, los pillos amedrentaron a los guardias, clientes y cajeros, bajo insultos y amenazas de muerte procedieron a llevarse el dinero que había en las cajas de recaudación y también el de las personas que iban a realizar depósitos.
Según varios vecinos el atraco duró muy poco. “Yo me asusté, llegaron esos tipos en moto con las caras tapadas y varias armas, lo que hice fue mirar desde las ventanas, el asalto duró unos cinco minutos y se fueron”, comentó uno de los moradores, que prefirió no identificarse.
Pérdidas. Según la Policía, los delincuentes se habrían llevado 16 mil dólares de caja y 700 dólares de una usuaria.
En su cuenta oficial de Facebook los directivos de la cooperativa indicaron a sus clientes que las oficinas estarían cerradas hasta ayer, debido a que se encontraban junto con agentes de la Policía Nacional haciendo el levantamiento de evidencias.
También se indicó que contaban con un seguro de robo y asalto para este tipo de siniestros.
Otro caso. Este no es el primer robo que sufre esta cooperativa, pues en febrero una de sus sucursales ubicada en la parroquia La Unión, del cantón Babahoyo, también fue asaltada.
En aquella ocasión cuatro sujetos que se movilizaban en tres motocicletas amedrentaron a los trabajadores del lugar para llevarse aproximadamente 10 mil dólares.