Dijo que previamente había ensayado con su esposa lo que harían para las elecciones, entonces llegaron en un carro hasta la unidad Eloy Alfaro y consultaron la mesa que les tocaba. Allí, le solicitaron la cédula y le pidió a su esposa que rayara a sus candidatos preferidos, agregó.

Aseguró que se sintió motivado a sufragar, porque ese documento lo piden para todo trámite y no podía darse el lujo de no contar con él. Explicó que tiene unos cinco años con ceguera total y que en las elecciones pasadas ya realizó el voto asistido.

Comentó que su condición proviene de la diabetes que le descubrieron hace unos diez años y que, a pesar de ello, en el carnet se indica que solo tiene 65 por ciento de discapacidad visual, razón por la que recibe el bono de desarrollo humano de 50 dólares, lo que le parece injusto, dijo.

Trabajo. Recordó que antes de perder la visión se dedicaba a la pesca artesanal, que efectuaba con sus familiares por tradición.

Siempre lo hacían en la zona artesanal de la ciudadela Mangle 2000, en la parroquia Leonidas Plaza.

Javier Naranjo, amigo de Peña, declaró que terminadas estas elecciones, el Gobierno debe dedicarse a realizar un nuevo censo y poder recalificar a personas con discapacidad.

Naranjo recalcó que la ceguera es una discapacidad que impide realizar cualquier actividad y que eso debe valorarse, agregó.

El hombre espera que los candidatos por los que votó tengan una gran visión sobre su cantón.