En la calle 5 de Junio, frente a la ciudadela Los Bosques, el comercio se intensifica y los fines de semana, especialmente, suben los decibeles. 

Doña Dora, que cuida a su madre de 86 años de edad, dijo que el municipio debe controlar. 

“El ruido de los carros, la música, los parlantes que los jóvenes cargan en sus carros a alto volumen, todo eso afecta, sin contar la campaña electoral”, señaló.

Miguel Estévez, jefe de Ambiente del Municipio de Portoviejo, dijo que el año pasado la Policía Nacional notificó a los propietarios de 80 motos y 24 vehículos por exceso de ruido en la ciudad. El GAD apoya con sus técnicos y el sonómetro para medir los decibeles, que en zona residencial no pueden exceder los 55 decibeles en el día y los 45 en la noche y, en zona comercial, los 75 en el día y 55 decibeles en la noche, en base a la normativa ambiental. La sanción va desde el 10% de un salario básico unificado hasta un SBU.

Dijo que con la Policía y la Intendencia controlan en avenidas más ruidosas.