Para la proforma 2019 destaco ciertos puntos:

Supuestos poco conservadores:   Supuestos que parecen cumplen expectativas políticas y comunicacionales destacan: Producto Interno Bruto (PIB), crecimiento de la economía, e ingresos por concesiones. Si la economía crece menos de lo previsto los ingresos de IVA e ICE serán menores. Se espera $1 mil millones en concesiones; aunque, hay necesidad de un marco legal apropiado.  Por lo que, los déficit primario y fiscal podrían estar subestimados igual que la necesidad de financiamiento.  

El  precio promedio del petróleo en la proforma amerita revisión dada su reciente caída.  Quizás las metas fiscales no son tan fáciles de alcanzar como se quiere presentar.

Intereses crecen: Pago de intereses de $3,4 mil millones o 6-7 puntos del IVA.  En 8 años el pago de interés en la deuda pública se ha quintuplicado. Como el pago de intereses crecerá en los próximos años si la economía no crece este se volverá más oneroso.

Subsidios al alza: $7 mil millones equivalente a todas las exportaciones de banano, camarón, y flores.  $4,2 mil millones para combustible; aunque, se indica que no se eliminarán los subsidios a los combustibles si hay un acuerdo con el FMI se lo hará.  

Financiamiento alto: Entre amortizaciones y déficit fiscal se necesitan $9-10 mil millones equivalente a $4-5 mil millones en préstamos del exterior.  El resto serán renovaciones de préstamos internos.  Esto en una coyuntura global compleja.   

Espero un incremento en atrasos a proveedores y no se incorpora todo lo solicitado por el IESS $2.457 millones.  Se presupuesta $1.995 millones incluyendo ISSFA e ISPOL (IESS $1.240 millones).  Al final, las conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) continuarán y veremos qué se obtiene en préstamos del viaje a China.    

Manabí es una provincia productora por excelencia con menor dependencia del sector público que otras; por lo que, sabemos que se necesitan políticas pro producción que faciliten el emprendimiento tales como crédito barato, reducción de trámites, etc.  Nuestra caída en el ranking de 118 al 123 en el estudio “Doing Business 2019” del Banco Mundial no es una buena señal en ese aspecto.