La defensa de Luiz Inácio Lula da Silva, preso por corrupción, pidió ayer ante la Corte Suprema la libertad del expresidente por la “pérdida de la imparcialidad” del juez que le condenó, Sergio Moro, quien aceptó ser ministro del Gobierno que asumirá en enero el mandatario electo, Jair Bolsonaro.