Albertina Calazacón, moradora  y miembro de la directiva de la comuna Chigüilpe, cree que   se debería aprovechar la tecnología para minimizar los robos y otros delitos que son comunes en la zona.

“En la UPC no hay internet  y los policías tienen un  área grande que cubrir. Además,  en muchas partes de la comuna no hay cobertura para los teléfonos, lo que    hace que en ocasiones resulte imposible que la gente se comunique para pedir ayuda”, afirmó. 

 

PIDEN MÁS CONTROL. El robo de ganado, de vehículos, y el robo en domicilios, son los delitos más comunes en la zona. 

Alejandro Calazacón, presidente de Chigüilpe, dijo que la unión existente entre los habitantes ha sido fundamental a la hora de defenderse.

“En varias ocasiones hemos acudido a ayudar a los vecinos y hemos impedido que los ladrones hagan de las suyas”, comentó.

La UPC del sector lleva en funciones aproximadamente 10 años. 

“Tenemos unos diez policías, pero no son suficientes. Necesitamos más vehículos, pues los policías    tienen que hacer patrullajes en los recintos aledaños y a  veces es imposible que puedan estar en todos lados”,  agregó Calazacón.

Aproximadamente 120 familias tsáchilas viven en la comuna. 

Limbert Zambrano, morador, dijo  que en Chigüilpe   todos se respetan y se ayudan.

“ La seguridad es algo que nos beneficia a quienes vivimos aquí”, sostuvo.