Una de ellas es el Plan de Vivienda Nuevo Alluriquín, que comprende 37 hectáreas y que cuenta con 149 socios. 

Al momento, unas 50 familias ya han edificado sus viviendas en el sitio. 

Segundo Faicán, presidente del sector, aseguró que el proyecto viviendístico nació por el poco espacio para construir que existe en el centro poblado de Alluriquín. 

“Sabemos del peligro que corre nuestra parroquia, pero acá es un lugar seguro para  vivir. Nuestra comunidad tiene un criterio diferente de organización y queremos ser ejemplo para los demás”, comentó.

La cooperativa de vivienda San Francisco y lotización Nuevo Amanecer, son las otras dos áreas urbanizadas.

 

Los proyectos. Los directivos del Plan de Vivienda Nuevo Alluriquín tienen en mente varios proyectos para ejecutar. 

Lo primero que desean lograr son las escrituras individuales para “poder tramitar obras importantes ante las autoridades”.

“Para acceder a este beneficio, el municipio nos debe declarar como zona urbana. Además, se debe tener en cuenta que en este sector hay otras lotizaciones que con el paso del tiempo se han ido poblando”, dijo Faicán.

El alcantarillado sanitario y una buena captación de agua potable son las obras que más se requieren en el sitio.

Luis Paladines, es uno de los 50 socios que construyó su casa en el plan de vivienda. 

“En estos pocos años (seis) de historia nos hemos poblado de gran manera, pero las necesidades también aparecen”, comenta.