Comerciantes de distintos lugares llegaron al sector para vender todo tipo de productos, apostados en carretas, triciclos, motos, tablas, cartones y hasta en el piso. También hubo vendedores ambulantes. 

Kirie Bravo, administrador del lugar, dijo que el crecimiento de la informalidad empezó hace dos semanas, cuando el municipio decidió retirar  los cuatro policías municipales que ejercían control a este problema. 

El comisario de Servicios Públicos, Mauro Pinargote, justificó el retiro del personal municipal aduciendo que la zona contenerizada es privada y que por esa razón debe asumir por cuenta propia el control comercial. 

“Es injusto lo que dice el comisario, ya que todos nosotros los comerciantes formales pagamos impuestos al municipio. Los negocios son privados, sí, pero esta zona es pública y es obligación de la comisaría regular la informalidad en la ciudad”, criticó Bravo.  

Reitera la medida. Luis Parrales, comerciante mayorista, dijo comprender que el trabajo es un derecho de todo ciudadano, pero no en que se lo haga de manera desordenada como ocurre ahora en la zona contenerizada. 

“La informalidad que vivimos en el viejo mercado de Tarqui está regresando y eso no se puede permitir. Necesitamos una autoridad que se amarre bien los pantalones y corrija esto porque parece que estamos en tierra de nadie”, dijo Parrales. 

En entrevista para Manavisión, el alcalde Jorge Zambrano reiteró lo dicho por el comisario municipal. Contó que por reiteradas ocasiones le ha planteado a la administración del lugar que se haga cargo del control.

“El desorden no se va a controlar solo porque le mande hoy a uno o dos policías municipales. La mejor forma de mantener el orden es que se hagan cargo de ese tema”, expresó el alcalde. 

Fabricio Parrales, comerciante, cree que si no se toman correctivos urgentes contra la informalidad, la delincuencia terminará ganando terreno en la 

zona.