El concejal  Raúl Trampuz dijo que “se ha pagado mucho dinero por algo que hasta la fecha no recibe Manta”.   

El 9 de agosto del año pasado el cabildo suscribió un contrato para la organización de un festival cultural y artístico denominado “Revista Musical Manta”, por un monto de 36.960 dólares (incluido el Impuesto al Valor Agregado). Lo hizo con la artista Claudia Oñate Cevallos. 

En el documento se estableció que en un plazo de 210 días, corridos a partir de la firma, Oñate debía hacer tres presentaciones artísticas en la ciudad, explicó Trampuz.  

Durante esos siete meses el municipio estaba obligado a pagarle el valor contratado en letras mensuales de casi 4 mil dólares. “Pero el plazo acordado para las presentaciones venció en marzo y la ciudad no ha presenciado ningún espectáculo a pesar que se llegó a cancelar cinco letras de ese contrato”, cuestionó el edil.  

Lo niega. Vía telefónica, Oñate rechazó las declaraciones de Trampuz. Lo acusó de tomar el caso como un tema político. 

Oñate negó la existencia de un incumplimiento laboral de su parte. 

Explicó que en el acuerdo se fijó que las presentaciones se harían una vez que el municipio terminara de cancelar todo el valor dividido en siete letras.   

“El contrato dice que las obras se presentan al finalizar las siete letras de pago, y hasta ahora solo me han cancelado cinco. No existe ningún incumplimiento, él (Trampuz) debería leer el contrato bien”, manifestó Oñate.  

La cantante dijo además que durante todo este tiempo ha invertido los recursos en la adquisición de vestuarios para las presentaciones, en la producción, el montaje escénico, las grabaciones y los sueldos de quienes participarán en el festival. 

“Con eso estamos cumpliendo el contrato porque lo que presentaremos será una producción inédita. No es un concierto común y corriente. Se trata de un festival con canciones exclusivas para la ciudad. Creo que eso (el concejal) no lograría hacerlo, con todo respeto. Esto solo es un tema político”, contestó Oñate.    

Lo reconoce. Analía Navarrete fue la directora municipal de Cultura que dio visto bueno al proyecto para dar paso al contrato. 

Ella, quien hoy es la directora de Turismo, reconoció que existe un incumplimiento en los tiempos, pero también dio por hecho que los conciertos musicales sí se realizarán en la ciudad. 

Navarrete explicó que meses después de firmado el contrato se acordó con Oñate realizar las tres presentaciones en fechas conmemorativas, sin importar que estén fuera del tiempo contratado. 

“Si bien el contrato determinó que durante los siete meses se debía presentar los eventos, hay que entender también que se trata de toda una producción que requiere de tiempo y mucho trabajo”, indicó la funcionaria. 

Las presentaciones. La dirección de Cultura ya fijó la primera presentación en junio por el Mes del Manabitismo. Las otras dos serían en octubre y noviembre. 

El concejal Trampuz cree que no se deben cancelar las otras dos letras restantes hasta que se realice, por lo menos, la primera presentación del festival.   

Parte del trabajo de Claudia Oñate consiste en grabar 11 canciones inéditas que serán de propiedad de la ciudad. 

Navarrete dijo que ese material ya está en manos de Cultura.  El departamento analiza reproducir copias para distribuirlas gratuitamente a los ciudadanos.