Jacinto Vera agradeció a los agentes policiales que llevaron la investigación que en poco tiempo logró identificar a los presuntos responsables del hecho de sangre, “aunque estamos sorprendidos por qué las autoridades no siguen con el procedimiento y se receptan la declaración de uno de los testigos”, indicó.

El cadáver de Winter Vera Cedeño apareció abandonado en un camino vecinal de la parroquia Lodana, del cantón Santa Ana, el 13 de marzo del 2016.

 

Con vida. Los hermanos de Winter expresaron que la investigación policial dio con la última persona que lo vio con vida. 

Recordaron que el 12 de marzo, en horas de la noche, tres sujetos llegaron por Winter a su casa ubicada en La Subidita al Cielo (vía a El Rodeo) supuestamente para que vaya con ellos a reparar a un vehículo. “Tres lo agarraron de forma amigable y lo hicieron ingresar al auto, donde estaba otro sujeto al volante. Luego no se supo más de él hasta que apareció sin vida”, dijeron.

 

Tranquilo. Los hermanos del occiso relataron que padecía de adicción a las drogas, y no tenía enemigos. Era el tipo de persona que se dedicaba a vivir su vida sin meterse con nadie; además estuvo en una clínica de rehabilitación para dejar las adicciones.

Luego que se lo llevaron, añadió, no volvieron a saber de él. 

Fueron los vecinos quienes en la mañana del 13 de marzo llegaron a decir que una persona con los rasgos de Winter Gonzalo había sido encontrada sin vida en Santa Ana. 

Los tatuajes que tenía en el cuerpo el mecánico automotriz alertaron a sus familiares, y al llegar a la escena del crimen confirmaron su identidad. Al hombre de 27 años de edad lo mataron con varios disparos de arma de fuego localizados en la cabeza y en la espalda.

 

Temor. Xavier y Jacinto Vera temen por sus vidas. Aseveraron que los presuntos asesinos pasan por su lugar de trabajo sonrientes y desafiantes. “Si algo nos pasa, ellos serán los responsables”, refirió Jacinto Vera.