De ellos, tres se llamarán Jesús, en agradecimiento a la bendición recibida el día en que el mundo cristiano recuerda el nacimiento del Hijo de Dios.

En una de las salas Gema Briones, de 18 años, acunaba en sus brazos a su primogénito y no podía contener las lágrimas de felicidad al hablar de “el mejor regalo que Dios me ha dado”. 

Su suegra, Viviana Moreira, también se emocionaba y lloraba al mirar a su nuera y a su primer nieto, para quien aún buscan nombre, aunque su madre dijo que le gustaría que se llame Johan Luis.

Esta madre primeriza, que tuvo un parto normal, esperaba que su hijo naciera antes de Nochebuena y llegó en Navidad.

La imagen se repetía en las tres salas donde se encontraban las parturientas que trajeron al mundo a sus hijos en esta fiesta.  

La primera hija de Ximena Toala nació a las 21h00 del 24 de diciembre, a tres horas de Nochebuena. La niña se llamará Heidi Johana y nació casi a las 41 semanas. “Ya se estaba pasando”, contó la feliz madre.

El tercer hijo de Gisella Mera nació el 25. “Llegó sin dolor”, dijo la madre, al indicar que lo esperaba del 15 al 18 y se atrasó para llegar en Navidad, por lo que ella tuvo que viajar desde Ayacucho para recibir atención. El niño se llamará Dexer Alexander. 

Desde Pueblo Nuevo también llegó Yusseth Pinargote para alumbrar a Evelyn Sofía, su segunda hija. 

Salvo una parturienta que tuvo que ser sometida a cesárea, las demás madres esperaban que el médico les diera el alta para retornar a sus casas llevando en sus brazos al mejor regalo de Navidad. 

Labor. La enfermera María Fernanda Mera, que fue parte del personal que recibió a los niños, manifestó que la llegada de cada bebé es una experiencia llena de ternura; incluso los recibieron con atuendos navideños. “Cumplir nuestra labor y ayudar a dar vida es un regalo de Navidad para nosotros”, expresó Mónica Villafuerte, médico del hospital.