Según se indicó, estarán en el nuevo patio de comidas que se ubica en la calle 10 de Agosto.

“La cual será una obra ecológica construida de caña guadúa, madera y otros recursos naturales, que está valorada en un monto aproximado de 548 mil dólares”, indicó Pablo Izquierdo, representante legal de la compañía contratista. 

Agregó que actualmente se están armando los puestos, adoquinando las áreas, dotando de agua potable al lugar, entre otros detalles.

 

Módulos.  Explicó que se construirán dos módulos de una planta, cada uno estará conformado por puestos que medirán 9,2 metros cuadrados  y,  además, en la parte central de los dos módulos se hará un comedor donde las personas podrán degustar de la variedad gastronómica. 

El alcalde Ramón González señaló que este proyecto  está siendo financiado por el Comité de Reconstrucción, y permitirá que cerca de 30 expendedores de comida sean beneficiados con la  obra, dijo.

“Estamos convencidos de brindarles un espacio en óptimas condiciones a las personas que vendían comidas en la parte alta del mercado municipal, el cual colapsó luego del terremoto. Pedimos paciencia a la ciudadanía, ya que las obras se están ejecutando de la mejor manera. Lamentablemente el terremoto dejó varios estragos, pero estamos haciendo las gestiones pertinentes para reconstruir el cantón”, manifestó. 

María Ramírez, quien tiene su puesto de comida en la zona cero donde anteriormente funcionaba el mercado municipal, indicó que las ventas han disminuido. 

Destacó que anteriormente, cuando estaba dentro del mercado, vendía más de 100 platos diarios, ahora solo vende la mitad.