Flérida Guillén tiene más de 20 años viviendo en este último sector y dijo que a pesar de que cuentan con las tuberías instaladas hace más de una década, no reciben el líquido y lo compra a los tanqueros.

Su vecina Glenda Gutiérrez aseguró que cada ocho días también debe llamar a los dueños de los tanqueros para llenar sus seis tanques con agua y poder lavar la ropa de su familia.

Afirmó que en ocasiones se ha quedado desabastecida del líquido, por lo que le ha tocado comprar agua en bidón o pedirles a sus vecinos.

Ambas señoras esperan el próximo año contar con  este servicio básico que tanto requieren.

Dotación. Frank Mendoza, director de Operaciones y Mantenimiento de Portoaguas, recordó que hasta el 2014 el sistema de agua potable tenía una cobertura del 65 % en la ciudad, pero con la operación del plan maestro de agua potable, la cobertura alcanzó cerca del 90 %.

Por este motivo, indicó que los tanqueros de agua en la ciudad han disminuido, pero los que aún existen abastecen a las zonas altas que no abarca el plan maestro, pues la cobertura máxima alcanza la cota 70.

Las zonas altas de las parroquias San Pablo, Andrés de Vera, parte del paso lateral y sectores alejados de Portoviejo, son los que aún no cuentan con el servicio.

Mendoza indicó que estos sectores están fuera del plan maestro, pero con los estudios que tienen han hecho un análisis para determinar otras zonas que puede abarcar el sistema.

Anunció además que Portoaguas ya cuenta con los diseños para cambiar la red de agua desde el sector Las Tres Marías, Andrés de Vera, vía a Manta, La Piñonada hasta la ciudadela Ciudad Perdida, con lo que se ampliaría la donación.

Este proyecto se aspira a ejecutar el próximo año, pero se requiere de unos 4,5 millones para poner en marcha esta obra, mencionó.