Esto se dio en el inicio del proyecto, que busca fortalecer la comercialización de esos productos. Así lo explica una nota publicada por el diario La Hora.

Jatari Campesino se encuentra a 40 minutos de Riobamba y está asentada justo a los pies del volcán Chimborazo, ubicación que les permitió a varios de sus ancianos, conocidos como los hieleros, vivir por muchos años de la comercialización del hielo, que lo llevaban hasta la ciudad. 

Fueron los mismos habitantes de las comunidades, entre niños, hombres y mujeres, quienes hicieron de modelos. 

Desfilaron por una corta pasarela de madera luciendo los atuendos de fibra de alpaca que ayuda mucho a aplacar el frío, sobre todo en esas zonas que están muy próximas a los páramos.

 

Familias. Este desfile fue el inicio del proyecto ‘Comercialización de fibra de alpaca de comunidades de los páramos andinos’, que impulsa la fundación Heifer Ecuador y que ha sido programado para desarrollarse durante tres años. Se involucrará a 1.000 familias alpaqueras.

De esta manera se pretende mejorar los ingresos de las comunidades a través de la venta de hilo, prendas tejidas a mano y artesanías, que renovarán la oferta de los productos a escala nacional.

Un kilo de hilo de alpaca se vende en 28 dólares y un saco, guantes y gorro tejidos con el mismo kilo se comercializan en 90 dólares aproximadamente. Entonces, la transformación con alto valor agregado es la mejor opción para las comunidades, señalaron desde Heifer Ecuador.

La fundación, presidida por Rosa Rodríguez, ha trabajado por alrededor de 19 años con las comunidades que viven y cuidan el páramo con la dotación de hatos alpaqueros, como una forma de parar la presión de las actividades agrícolas y pecuarias en este ecosistema. 

Varios promotores de las comunidades involucradas han sido capacitados en el país y en Perú en el proceso adecuado de esquila, clasificación, hilado, técnicas de manejo de tejido, y ahora son reconocidos capacitadores locales, comentaron. 

Se han realizado en total cinco encuentros nacionales de comunidades alpaqueras, que han sido espacios de capacitación e intercambio de conocimientos.