Los tres países llegaban sin rivales dentro de su grupo regional a las elecciones celebradas en la Asamblea General de Naciones Unidas y ocuparán las plazas que dejarán vacantes a final de año Bolivia, El Salvador y Paraguay.
La candidatura chilena recibió el respaldo de 175 de los 193 miembros de la ONU, mientras que México obtuvo 179 votos favorables y Perú 180.
Para ser elegidos, los países debían recibir al menos los 97 apoyos que conforman la mayoría en la Asamblea General.
El Consejo de Derechos Humanos, con sede en Ginebra, está integrado por 47 países que cumplen mandatos de tres años y cuyos asientos se reparten en grupos regionales.
El Consejo, por su parte, también ha recibido numerosas críticas, entre otras cosas por tener entre sus miembros a países acusados de graves violaciones de los derechos humanos, informaron medios internacionales.