“Es la primera vez que vengo (a las fiestas), pero no me han quedado ganas de volver, la organización fue pésima. Mientras nosotros estamos pagando arriendo afuera las ventas ambulantes no son controladas”, dijo.

Ella pagó cerca de 150 dólares por permanecer bajo una carpa, le dijeron que ya no había puestos y tuvo que aceptar lo que le ofrecieron.

Hugo Gusqui esperará hasta el próximo domingo para hacer maletas.

Él y su esposa llegaron desde Guayaquil.

“Permiten que los comerciantes invadan la vereda”, denunció.

Ellos comercializan lencería, y también se quejan de las bajas ventas en la feria comercial de la calle Bruselas y avenida Abraham Calazacón.

 

Más. José Sarabia llegó de la Ciudad Azul, Pelileo,  con un camión lleno de jeans.

El hombre estará hasta el miércoles  en la calle Brusellas.

“Ha estado complicado vender, la situación económica está difícil, siempre vengo para acá (Santo Domingo) y me ha ido bien, pero este año no”, afirmó.

El miércoles se irá a El Carmen donde se organiza otra feria por las fiestas patronales del cantón manabita.

Desde ayer en el puesto de Sarabia hay ofertas.

“Hacemos remates para vender, hay prendas desde cinco dólares, hemos estado una semana y eso nos genera gastos”, cuenta.

El municipio informó que en la calle Bruselas hay 700 locales comerciales.

En el sitio desde hoy los vendedores anunciaron descuentos para poder regresar a sus casas con las maletas vacías y los bolsillos llenos.