El documento fue revisado ayer en el comité de la Junta, entidad a la que acudió la madre del menor a denunciar el hecho.  

Wilmer Bone, miembro de la Junta, dijo que está listo además un informe de la evaluación psicológica hecha al niño de siete años y alumno de la unidad de educación especial de Santo Domingo.

“Además se ha desarrollado una investigación en la institución acerca de los acontecimientos. La maestra fue suspendida por parte del Ministerio de Educación y el menor continúa asistiendo a clases”, señaló.

 

DENUNCIA. El lunes la madre de familia ubicó la denuncia del supuesto abuso.

Según ella la docente, para evitar que el niño de siete años salga al recreo, lo encadenó al pupitre, a modo de castigo.

Bone indicó que la Junta dispuso una investigación psicosocial para determinar si otros alumnos pasaron por la misma situación.

“El niño habría sido amarrado con una cadena y un candado”, dijo Pablo Cuaical, miembro de la Junta.

En una entrevista otorgada a diario Extra el menor detalló que habría permanecido encadenado de su pierna izquierda a la silla, mientras los demás estudiantes se burlaban de él.