Con el triunfo, los “toreros” sumaron 38 puntos y se ubica en segundo lugar de la tabla. Pese a que el panorama sigue siendo complejo y que ganar la etapa depende casi de un milagro, Barcelona es el único equipo que puede darle alcance al líder Delfín.

Los “Toreros” ahora necesitan que Delfín no sume en las últimas dos fechas ante Liga de Quito en Manta y ante River en Guayaquil, y ellos sumar los seis puntos ante Macará en Ambato y Deportivo Cuenca en el Monumental.

Es el único panorama de Barcelona para llegar a los 44 puntos que suma Delfín y por gol diferencia llevarse la etapa.

Barcelona fue el equipo que empezó el compromiso teniendo el balón el mayor tiempo en sus pies, pero Emelec era más profundo cuando la recuperaba, sin ser tan peligroso.

A los “canarios” les hacía falta ser letales en el área, algo que lo logró a los 38 minutos. Un centro de Ely Esterilla fue conectado por el delantero uruguayo  Jonathan Álvez, que con la complicidad de Esteban Dreer, marcó el primer tanto del encuentro.

Era el gol que lo mantenía vivo a Barcelona y el primer tiempo terminó con el campeonato ecuatoriano en suspenso.

Pero en la segunda mitad los azules, dirigidos por Alfredo Arias, salieron con otra actitud. Le ganaron el medio campo a Barcelona con buenas actuaciones de Fernando Gaibor y solo tres minutos después de haber iniciado el complemento empató el encuentro.

Ayrton Preciado recuperó una pelota en el medio campo y en contragolpe, en conjunto con Brayan Angulo, puso la igualdad. Una vez más los “toreros” mostraron deficiencia para el retroceso y romper los contragolpes de los rivales. La jugada de Emelec hizo recordar a la de Delfín cuando el domingo puso el 2-1 con tanto de Roberto Ordóñez.

Pero Barcelona sabía que para ellos era un choque en el que no debían fallar. El estratega Guillermo Almada refrescó el ataque con el ingreso de Cristian Alemán y Erick Castillo, algo que le dio resultado, porque volvió a ganar el medio sector.

Barcelona fue con todo a buscar la victoria y primero, a los 78 minutos el travesaño le dijo no a un remate de Álvez, pero tres minutos después tuvo la revancha. Después de una gran jugada de Castillo por la izquierda el centro fue conectado por Álvez que aumenta la ventaja como goleador del campeonato con 13 tantos.

Barcelona dejó un mensaje claro: que no lo den por muerto aún.