Tras la intervención en demoliciones, así como por la acumulación de tierra ha desaparecido lo que una vez fue acera y brindaba un espacio de seguridad para los transeúntes.

Xavier Mieles, quien trabaja en el sector, contó que tras unos trabajos sanitarios se dejó gran cantidad de material que rellenó un agujero sobre lo que fue acera. “Ahí ha quedado pura tierra y es un peligro cuando llueve porque se convierte en lodo”, se quejó.

El ciudadano pidió la intervención porque son varias las aceras que están destruidas en la ciudad y especialmente en el centro de la urbe.

Augusto Cedeño, quien pasa a diario por el sector, dijo que estas son reparaciones que se pueden hacer de forma provisional y que son necesarias para mejorar la imagen de la urbe.

“Si se tardan diez años en hacer la reconstrucción de todo, vamos a pasar diez años así”, cuestionó.

En el lugar lo vecinos también piden la reparación de una alcantarilla, cuya tapa ha colapsado dejando un hueco en el que se explicó que ya por lo menos una vez cayó un niño.

“Es un peligro”, dijo Mieles sobre esta alcantarilla sin tapa.