Jhon Charles Moreira, responsable de los procesos de demolición del municipio, indicó que junto con los propietarios de estas casas y el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), se realizó una inspección de estas para determinar su estado, cuya mayoría autorizó que las derrocaran.
“Si llegase a pasar que alguien quiera impedir la demolición, se tiene una documentación firmada por los mismos propietarios autorizándola, y con eso se procederá al derrocamiento porque de eso depende la seguridad de las personas”, detalló.
Casas. Indicó que de las 18 viviendas hay 8 autorizadas para demoler en este 2017; mientras que el restante, que fueron autorizadas para derrocar en el 2016, está a la espera de la llegada de maquinarias para iniciar con la demolición en los próximos días, ya que por varios motivos el proceso no se realizó a su debido tiempo.
El ciudadano Carlos Espinoza dijo que en la calle Atahualpa y Washington esquina, hay un edificio de cinco pisos que aún no ha sido intervenido, y que a simple vista se observa que tiene afectaciones.
Sostiene que en la misma calle hay otra vivienda que está en similares condiciones.
“Las autoridades deben comenzar a demoler estas estructuras, porque los ciudadanos cuando caminamos por el lugar lo hacemos con miedo a que alguna pared nos caiga encima”, señaló.
Patricio Espinel, coordinador de Gestión de Riesgos del municipio, expresó que el análisis y la evaluación se realizan con personal y apoyo técnico de la municipalidad y otras instituciones, como los ministerios de Inclusión Económica y Social, y de Transporte y Obras Públicas.