Los familiares detallaron que Mendoza residía en el sitio San Eloy del cantón Rocafuerte y a unos metros, frente al cementerio del sitio, tenía una propiedad donde pastaban sus reses y cada tarde acudía a echarles un vistazo.

Los allegados contaron que Mendoza salía de su vivienda a eso de las 14h00, revisaba su ganado y aproximadamente a las 15h00 retornaba a su hogar, pero el viernes no volvió.

Los moradores del sector que conocían la rutina de Mendoza manifestaron que empezaron a preocuparse por él, por lo que decidieron ir a buscarlo y al no poder hallarlo pidieron ayuda a la Policía y los bomberos.

Ahogado. Una decena de personas se unió a la búsqueda de Mendoza y fue así como lograron hallarlo.

Los habitantes dijeron que en el lugar donde estaban las reses se “empoza” el agua cuando llueve y se forma una especie de charco.

Según los amigos de Mendoza, cada vez que el lugar se llenaba de agua él tenía como costumbre sacarse el pantalón y pasar por el agua hasta llegar donde estaban sus reses, y esa fue la pista que los llevó a descubrir su cadáver.

Los vecinos dijeron que al revisar el sector encontraron el pantalón de Mendoza tendido en un árbol, por lo que policías, bomberos y sus amigos se lanzaron al agua a buscarlo, hasta que a eso de las 20h45 del viernes lograron hallar su cuerpo.

La Policía llegó y trasladó el cadáver al centro forense de Manta, en donde se le realizó la autopsia y se confirmó que Mendoza se había ahogado.

Él será sepultado la tarde de hoy en Rocafuerte.