Las autoridades señalaron que siete de los decesos ocurrieron en el condado Cook, mientras que los otros han sido reportados en los condados Brooks y Berrien.

Entre los muertos figuran personas que vivían en un parque de casas móviles y las autoridades locales han dado a conocer que en algunos de estos conjuntos de viviendas rodantes se han reportado “grandes daños” tras sufrir el embate de árboles o ramas caídas por los fuertes vientos.

El gobernador de Georgia, Nathan Deal, declaró  ayer el estado de emergencia en siete condados afectados por las severas tormentas desde la madrugada de ayer, incluidos Cook, Brooks y Berrian.

La medida incluye también a los condados Atkinson, Colquitt, Thomas y Lowndes, que sufrieron daños materiales.

Según informaron las compañías locales de electricidad, más de 8.000 viviendas han amanecido sin fluido eléctrico.

Las muertes en Georgia, en donde se espera que en el transcurso de la semana vuelvan las tormentas, se dan a conocer luego de que el sábado se reportara el deceso de cuatro personas en Mississippi.